La práctica de la Órbita Microcósmica es esencial dentro del sistema taoísta de sanación por la que te unes a tu propia fuerza vital y aprendes a sentirla por todos los meridianos de tu cuerpo, sobre todo, por los principales.
Gracias a su práctica correcta y constante puedes aumentar gradualmente tu nivel de vitalidad y tu propio poder personal al mantener la órbita microcósmia en correcto funcionamiento
-abierta y en fluido movimiento- ya que es el circuito principal para la circulación por todo el organismo del flujo de energía.